Metro Bilbao tiene por delante
importantes retos que asumir. Además de recuperar la confianza de
la clientela, hay también cuestiones internas directamente
relacionadas con ello, tales como la organización del servicio, la
elaboración del presupuesto, o la negociación del convenio
colectivo, sobre las que la nueva dirección necesita empezar a
trabajar con intensidad.
Para ello, hoy mismo, el equipo directivo se ha reestructurado de
manera provisional, pasando a estar formado por 5 direcciones,
todas ellas al mismo nivel, y en dependencia directa del Director
Gerente: Capital Humano, Planificación, Administración, Dirección
Técnica y Dirección Adjunta a Gerencia. Esta última tendrá entre
sus funciones la coordinación de las diferentes direcciones
mencionadas y dará apoyo a la gestión global de la empresa.
El Director Gerente ha informado esta misma tarde al presidente
del comité de empresa. También la totalidad de la plantilla dispone
de la información desde esta tarde.
La estructura directiva que se implementa en este momento supone
con respecto a la heredada del anterior equipo gestor, un ahorro
directo de costes salariales y de seguridad social para la empresa
de 250.000 euros anuales. El presente organigrama aplana y
racionaliza la estructura anterior excesivamente piramidal, con una
dirección que se organizaba en cuatro niveles jerárquicos
(Consejero Delegado, Director Gerente, Direcciones y Jefaturas) que
totalizaban 14 personas. Con el actual esquema de dirección
aprobado, donde se producen tres modificaciones de dependencia
jerárquica sin incrementos salariales, el equipo de dirección se ve
además reducido en 2 personas, concretamente el Consejero Delegado
y una Jefatura. La estructura directiva de Metro Bilbao llegó a
tener entre finales de 2010 y el pasado 2012 hasta 8 direcciones,
con sus Jefaturas, además de las figuras de consejero Delegado y
Director Gerente.