El consejo de dirección de la MTA votó un paquete de nuevas
medidas que afectó especialmente a la tarjeta de transporte que
permite realizar viajes ilimitados durante un mes, cuyo precio se
incrementará un 7,6 %, al pasar de 108 a 112 dólares.
La empresa que gestiona el mayor sistema de transporte público
de EEUU aprobó también un aumento de 25 centavos del billete
sencillo hasta los 2,50 dólares, mientras que la tarjeta semanal
subirá un dólar hasta situarse en los 30 dólares.
Además, la bonificación que reciben los usuarios al recargar su
tarjeta se reducirá al 5 % (desde el 7 % actual), pero estará
disponible para cualquier persona que añada al menos 5 dólares en
una tarjeta, frente al mínimo actual de 10 dólares).
Los precios en los ferrocarriles de cercanías Metro-North y de
Long Island Rail también aumentarán a partir del 1 de marzo, aunque
la magnitud del aumento variará en función de la distancia de un
viaje y la hora del día.
Según señaló la empresa, estos cambios están diseñados para
recaudar ingresos adicionales de 450 millones de dólares y ayudar a
cubrir los déficit presupuestarios de la MTA.
Pero esta subida, la cuarta que se produce en los últimos cinco
años, ha sido recibida por los usuarios entre críticas, pues
consideran que los pasajeros del transporte urbano son los únicos
que están pagando los problemas financieros de la MTA.
Además, el mayor aumento de tarifa ha recaído sobre la tarjeta
mensual, por lo que serán los residentes y usuarios habituales
quienes sufran especialmente estos cambios, ya que los billetes
sencillos, que habitualmente utilizan los turistas, sólo subirán 25
centavos.
Lo mismo sucedió en 2010, cuando la MTA aprobó una serie de
medidas destinadas a mejorar la salud de sus cuentas, entre las que
destacaba un aumento en la tarifa de la tarjeta mensual, que subió
un 17 %.
La MTA atiende a una población de 14,9 millones de personas, y
solamente la red de metro, que cuenta con 468 estaciones en los
cinco condados, transporta diariamente a 5,5 millones de
pasajeros.